viernes, 24 de abril de 2015

UNA PELICULA DE UNA VIDA NORMAL



Sonó mi celular a las 6:00 a.m lo apago de inmediato y me quedo ahí por 5 minutos, me levanto voy hacia el armario y busco ropa, la mayoría de veces no se que ponerme, pruebo varias opciones hasta que encuentro la indicada  me despido de mis padres y salgo a esperar el bus mientras llega escucho música desde mi celu, pienso en muchas cosas pero lo más importante es que voy a llegar tarde al trabajo, por fin pasa el mío lo abordo me siento al lado de la ventana, me gusta mucho ese lado, me gusta mirar por la ventana y observar todo,  me interesa mucho ver cada persona e intentar inventar una vida, imaginar que piensa,  que propósitos tienen, o si tienen alguna tristeza, y a veces pienso que mi vida es como una película tal vez de esas películas que nadie quiere ver o de esas que las personas dicen es buena pero no para verla en cine, entonces me pregunto acaso todas esas personas, son solos extras que han puesto para llenar un espacio??… y ahí estaba imaginando, pensando, analizando… pero espere, ya me tengo que bajar, me levanto y voy esquivando personas y empujando sin querer porque la persona que esta atrás mío me obliga hacerlo y yo soy disculpe señora, con permiso señora hasta que por fin salgo del bus y ahí salgo caminando pero rápido, llego al trabajo saludo muy amablemente a mis compañeros del trabajo, tengo algunas cosas pendientes y empiezo a trabajar  hasta 5:30 que salgo del trabajo aprovecho para caminar un rato, camino hasta la quinta, pienso en la persona por la cual me he sentido enamorada y sonrió, recuerdo los momentos que hemos pasado, entonces, la brisa de la tarde me despeina el cabello y recuerdo un día que íbamos caminando y el viento hizo volar mi sombrero y tuvimos que correr detrás de el, y me da risa, la gente me mira, no lo entiende pero yo no les hago caso, hasta que llamo y escucho su voz y entonces me pongo feliz es bueno escucharte después una jornada laboral le digo o tal vez no se lo dije, tal vez solo lo pensé mala costumbre de no expresar mis sentimientos.